Casi todos estaremos de acuerdo en que el navegador web es posiblemente el programa más utilizado, y hay muchas maneras de aumentar su seguridad mientras nos movemos por Internet.
Afortunadamente, Chrome es uno de los navegadores más seguros que podemos instalar. Viene con muchas funciones para mejorar la seguridad en línea, pero es posible que no estés familiarizado con todas ellas.
Comprobación de la seguridad
Las herramientas de verificación de seguridad y la guía de privacidad de Google Chrome permiten comprobar que el navegador es lo suficientemente seguro.
También ayuda a identificar cualquier filtración de datos relacionada con nuestro correo electrónico, si existen actualizaciones del navegador, extensiones maliciosas, o la seguridad de las contraseñas guardadas en el mismo.
¿Cómo?
Haz clic en los tres puntos en la parte superior derecha y selecciona Configuración -> Privacidad y seguridad ->Comprobar Ahora.
Chrome te alertará en unos segundos sobre las posibles debilidades de seguridad.
En la misma pantalla tienes otra serie de configuraciones.
Borrado de datos
Nuestros navegadores almacenan cookies que se utilizan, en el mejor de los casos, para personalizar la publicidad.
Sin embargo, esto se puede evitar en gran medida.
Abierto el apartado de «Privacidad y seguridad» (como en el caso anterior) selecciona la opción «Borrar datos de navegación».
Marca lo que deseas borrar, como el historial de navegación, o las cookies.
De forma predeterminada, se eliminará todo, pero también puedes establecer el intervalo de tiempo en el que quieras que esto se lleve a cabo.
Para obtener más opciones, puedes seleccionar «Avanzado»
Aquí, por ejemplo, puedes eliminar las contraseñas guardadas y la configuración de sitios web.
Bloquear futuras cookies.
Desde el mismo apartado, Selecciona «Cookies y otros datos de sitios» y decide qué tipo de cookies quieres guardar.
También puede habilitar:
- Eliminar cookies y datos del sitio cuando cierres todas las ventanas.
- Enviar una solicitud de no rastrear (Do Not Track).
También puedes ir a «Ver todos los datos y permisos de sitios » para administrar archivos individuales.
No dejes que el modo incógnito te engañe
No debes asumir que eres anónimo mientras utilizas el modo incógnito de Google (o cualquier navegador).
Chrome no almacenará tu historial mientras navegas, pero tu proveedor de servicios de internet y los sitios web que visitas, aún pueden rastrear tu actividad.
Y por supuesto, Google continuará recopilando todos los datos que pueda.
Para evitar esto, la solución pasa por usar una VPN o un servidor proxy: una especie de puente entre tu red y el resto de Internet.
Actualiza Chrome periódicamente
Chrome se actualiza automáticamente cuando hay una nueva actualización disponible o algún parche de seguridad para cubrir una vulnerabilidad.
Sin embargo, si las actualizaciones automáticas están desactivadas, es posible que estés utilizando una versión desactualizada de Chrome sin saberlo.
Y no es ningún secreto, que un programa obsoleto o vulnerable, es una puerta abierta a los exploits.
Pero no debemos confundir seguridad con privacidad.
La privacidad de los datos se refiere al manejo, procesamiento, almacenamiento y uso adecuados de la información.
Se trata de los derechos que tiene los usuarios con respecto a la recopilación de su información personal.
La seguridad de los datos se centra en proteger los datos personales de cualquier acceso no autorizado con fines maliciosos o para su explotación.
Y en este sentido, podríamos decir que Chrome es muy seguro pero relativamente privado.
Dicho esto, hay algo que puedes hacer para que el navegador de Google sea un poco más privado.
Abre tu cuenta de Google e inicia sesión.
Ve al apartado «Datos y privacidad» y selecciona «Comprobación de privacidad».
Mediante un asistente podrás elegir qué datos quieres que Google recopile sobre ti.
