Tal vez te registraste en una red social o en cualquier servicio en línea y luego te diste cuenta de que no era lo que esperabas, lo hiciste de forma puntual para un tema en concreto, o simplemente perdiste interés. No eres el único, muchos abandonan sus cuentas por diversos motivos, pero no se molestan en eliminarlas.
Una botnet es una colección de dispositivos conectados a Internet infectados por un tipo común de malware y controlados de forma remota. Estos dispositivos pueden ser tanto ordenadores personales como routers, reproductores DVR, electrodomésticos inteligentes, cámaras de vigilancia, etc.
Una puerta trasera (en inglés backdoor) es un método alternativo de acceso a un programa informático o sistema de hardware que evita los mecanismos de seguridad habituales como por ejemplo el cifrado y los sistemas de autenticación.
Nos registramos en servicios en línea, y después iniciamos sesión para pagar facturas, comprar productos, ver películas, o saber qué hacen amigos, familiares y conocidos en las redes sociales.
Desde su creación en 2017, los modelos generativos se han utilizado muchas veces para desnudar «artificialmente» a personas con el fin de crear vídeos pornográficos muy realistas. Y para empeorar las cosas, las herramientas para estos propósitos, se están volviendo cada vez más accesibles.
Básicamente, el pharming es un tipo de ataque informático que utiliza el envenenamiento de DNS, o la modificación del archivo Host, para dirigir a las personas desde sitios web legítimos a páginas fraudulentas.
En un mundo perfecto, un motor de búsqueda debería ofrecernos excelentes resultados respetando nuestra privacidad. Lamentablemente, ni este es un mundo perfecto, ni las empresas que proporcionan estos servicios «gratuitos» son una ONG.