Consumir pornografía, es un hábito más común de lo que parece. Por lo tanto, salvo algunos casos patológicos, puede considerarse una actividad «normal». Pero en lugar de preocuparte por posibles lesiones en el túnel carpiano, es posible que desees asegurarte de proteger tu privacidad y seguridad.
A nosotros nos parece un mundo bastante sórdido, que no tiene nada que ver con las relaciones sexuales de la vida real.
Pero este blog va de seguridad informática y no es nuestra misión pontificar en este sentido.
Solamente queremos dejar muy claro que mediante este artículo no pretendemos fomentar el consumo de este tipo de contenidos.
Lamentablemente, el número de adolescentes, incluso hasta niños, que en un momento dado han estado expuestos a la pornografía en Internet, es cada vez mayor. Y sin duda, es el peor referente que pueden tener para aprender sobe sexualidad.
En cualquier caso, una persona adulta es libre de consumir estos contenidos con las mayores garantias de seguridad y privacidad posibles.
¿Son peligrosas estas páginas?
En principio, las páginas que distribuyen este tipo de contenidos no están dirigidas por ciberdelincuentes decididos a causar daños a sus usuarios a propósito.
A los propietarios de los portales de pago les interesa bastante que los clientes se sientan en un entorno seguro, tengan una buena experiencia, se suscriban, y repitan la visita.
Y los que ofrecen contenido gratuito, y se financian mediante la publicidad, quieren que los visitantes hagan clic en los anuncios, o acaben comprando una suscripción.
Sin embargo, pueden existir riesgos asociados que van más allá del control de los administradores.
Los sitios pornográficos más populares, siguen siendo uno de los objetivos más codiciados por los piratas informáticos.
Su gran afluencia de usuarios, los convierte en un coto de caza donde perpetrar todo tipo de fechorías.
Publicidad maliciosa y adware
Muchas páginas gratuitas para monetizar el invento tienen montones de anuncios de terceros incrustados.
Estos anuncios vienen en forma de iFrames y es común que algunos villanos aprovechen la popularidad de estos sitios, para insertar cargas útiles de malware en algunos banners distribuidos mediante redes publicitarias.
Un clic en alguno de ellos podría terminar infectando el dispositivo con cualquier cosa, como por ejemplo ransomware.
Por otro lado, el adware una vez instalado en el sistema, mostrará anuncios acordes con la temática de la página.
También puede desencadenar insidiosas ventanas emergentes en bucle, falsos avisos de seguridad, o ventanas que solicitan al usuario que active las notificaciones.
El adware, no solo es molesto, sino que también puede invadir la privacidad.
Si eres de los que comparten el ordenador con otros miembros de la familia, probablemente no te haga ninguna gracia que aparezcan anuncios de alargadores de pene y artilugios por el estilo cuando otros estén usando el dispositivo.
Esto sucede normalmente cuando se activan las notificaciones: no lo hagas.
Estafas
Los piratas informáticos afirman haber tomado el control del sistema y grabado al usuario masturbándose frenéticamente mientras veía pornografía.
Seguidamente, amenazan con enviar las imágenes a todos sus contactos a menos que pague cierta cantidad de dinero.
La buena noticia es que la mayoría de veces la amenaza es una farsa. No saben si miras la Banana mecánica, o prefieres el Disney Channel.
Pero en algunos casos, puede ser real. No te arriesgues y asegúrate de mantenerte seguro protegiendo tu dispositivo con una solución antimalware confiable.
O mejor, cubre la webcam con esparadrapo: sin duda es la solución más eficaz.
Cómo proteger tu seguridad y privacidad
Puedes sentirte tentado a navegar de incógnito para asegurarte de que nadie más que tú sepa los sitios que has visitado.
Si bien esto puede ser una solución parcial (no almacena el historial de búsqueda, las cookies, etc.), la navegación de incógnito no es realmente privada.
Los principales navegadores como Google Chrome y Mozilla son muy claros en este sentido cuando abres una nueva ventana de incógnito en el navegador.
Si tu principal preocupación es evitar que las personas con las que vives o compartes el ordenador encuentren rastros de tu actividad en línea, entonces la navegación de incógnito está bien.
Pero tu proveedor de servicios de Internet o el administrador de red de tu empresa (si alguna vez tienes la brillante idea de acceder a dichos sitios web desde tu lugar de trabajo) aún pueden encontrar la lista de dominios a los que has accedió.
Si las personas con acceso a tu red doméstica tienen un mínimo de conocimientos, también pueden saberlo.
Instala un bloqueador de anuncios en el navegador
Como hemos mencionado anteriormente, los anuncios maliciosos son una de las principales fuentes de malware en los sitios web, y no solamente en los pornográficos.
Una extensión de este tipo evitará en gran medida la aparición de iFrames cargadas de malware.
Si bien un bloqueador de anuncios puede mantener a raya parte del riesgo, debes saber que estos tienden a desactivarse una vez que ingresas en modo de navegación de incógnito, a no ser que cambies esta opción de forma manual.
uBlock Origin es una extensión del navegador de código abierto para filtrado de contenido y bloqueo de publicidad en línea.
La extensión está disponible para los navegadores Safari, Firefox, Chromium, Chrome, Opera y Edge, y destaca por su poco uso de memoria
Ten esto en cuenta al descargar películas
Si prefieres las descargas a la retransmisión en directo (¡vieja escuela!), asegúrate de que los archivos solo tengan los sufijos mp4, mov o wmv. Estos son formatos de archivo de video legítimos y literalmente no hay forma de que puedan contener malware.
Evita formatos de compresión y archivos ejecutables como por ejemplo RAR, ZIP .7z, bzip2 .exe, etc.
Otro consejo es no descargar nunca una película de este tipo desde un sitio de intercambio de archivos como por ejemplo torrents.
Aquí es donde pulula todo tipo de malware disfrazado de película porno preparado para infectar tu dispositivo.
Incluso puedes descargar contenido ilegal como pornografía infantil sin ser consciente de ello.
Y alegar ignorancia, no te va a salvar de acabar delante de un juez en caso de que tu IP sea detectada.
Asegúrate de que los sitios estén cifrados
Sabrás si estás en uno, si la dirección del sitio web, empieza por HTTPS, en lugar de HTTP.
Dado que esperas que tu experiencia online sea segura, te recomendamos que adoptes HTTPS para proteger tus conexiones con todos los sitios web, independientemente de lo que contengan.
Pero ten en cuenta que cualquiera puede comprar un certificado SSL u obtener uno gratis, por lo tanto, el hecho de que un sitio tenga un certificado de seguridad no significa que sea legítimo.
Muchas páginas de phising utilizan este recurso para dar un toque de legalidad a sus perpetraciones.
Intenta no ir a sitios gratuitos
Por supuesto, existen sitios gratuitos que viven de la publicidad o la recopilación de datos, y están libres de software malicioso.
Pero si deseas ver pornografía con tranquilidad, entonces la mejor opción es pagar, siempre y cuando el servicio ofrezca garantías.
Los archivos de video porno son simplemente películas codificadas para su distribución digital y por si mismas, no representan una amenaza de seguridad.
Por otro lado, los sitios de membresía no acostumbran a tener anuncios invasivos, ni facilitan la minería de datos o la entrega de malware.
Quieren mantenerte como cliente y no dañar el dispositivo que estás utilizando para que puedas disfrutar de sus películas.
Es una forma de negocio, y como tal desean mantener una buena reputación.
Nunca uses tu perfil de redes sociales para iniciar sesión, ni facilites tu correo electrónico principal o el número de teléfono.
Para realizar el pago puedes utilizar una tarjeta virtual, que sirve para hacer transacciónes en Internet sin tener que revelar los datos de tu tarjeta de crédito.
Esto sin duda ofrece un valor añadido de seguridad y privacidad.
Evita que otros rastreen tu actividad
Mediante los rastreadores publicitarios, las compañías tecnológicas pueden realizar un seguimiento de los usuarios en los sitios web.
Aunque según ellos, sus servicios publicitarios nunca pueden transmitir información de identificación personal, siendo realistas, a más del 50% de los adultos que miran porno, no creo que esto les haga mucha gracia.
La integración de widgets de redes sociales en los sitios sitio web juega un papel único en el ecosistema de marketing, ya sea para aumentar el rendimiento general del negocio, o también para atraer a nuevos usuarios.
Y estos elementos acostumbran a realizar un seguimiento de los visitantes de las páginas que los tienen instalados, sin necesidad de que estos tengan que hacer clic en el botón de turno.
Como evitarlo
Privacy Badger es una extensión, disponible para Firefox, Chrome y Opera. Solo tenemos que instalarla desde la página oficial y hará todo el trabajo.
Por defecto, esta extensión bloqueará todas las conexiones que no procedan de la página que estemos visitando; no sirve solo para Google y Facebook, sino también para otros rastreadores.
Cómo ver porno sin que nadie lo sepa y mantenerte a salvo
Si sigues todas las recomendaciones anteriores, no serás invulnerable (el anonimato total en Internet no existe), pero por lo menos mitigarás en gran medida los riesgos.
Pero si quieres un plus de privacidad, la próxima vez que estés pensando en visitar un sitio web para adultos, asegúrate de utilizar una red privada virtual (VPN) de confianza, que cifrará todas tus actividades, a través de un túnel seguro.
Tu dirección IP real estará oculta, por lo que será muy difícil para tu proveedor de servicios de internet, los rastreadores de terceros y los piratas informáticos vincular esos datos a tu identidad.
No te olvides de tener Windows Defender (u otro software de seguridad) activado, y con las últimas definiciones de malware.
Y aunque el contenido sea caliente, manten la cabeza fría.
